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Agosto 2012
Edición No. 282
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Mis sexenios (53)

 

José Guadalupe Robledo Guerrero.

La segunda etapa del sexenio montemayorista
Los comentarios sobre el accidente del avión de Tacsa (Transportes Aéreos de Coahuila, S. A.) que cobró la vida de nueve personas no se terminarían con la repentina y oficiosa declaración de Rogelio Montemayor, en donde aseguraba, sin el dictamen de los especialistas, que el desplome de la aeronave había sido causado por un error del piloto, quien había muerto en el accidente.

El 7 de noviembre de 1995, el Presidente de la Federación de Pilotos y Propietarios de Aviones, Mariano García Orihuela reprobó en Torreón las versiones gubernamentales, en particular las que ponían en duda la capacidad del piloto, pues aseguraba que era de los mejor preparados, con 12 mil horas de vuelo.

Por ese entonces, a Montemayor le valía un sorbete Coahuila, pues él andaba muy ocupado en la ciudad de México buscando que el Presidente Zedillo lo nombrara Secretario de Hacienda, así lo decían los cortesanos montemayoristas.

Para estos días también Raúl, el hermano incómodo del ex Presidente Salinas, estaba encarcelado acusado -entre otros delitos- de “enriquecimiento inexplicable”, por eso la actitud convenenciera de Montemayor hizo que los salinistas lo calificaran de traidor a su jefe CSG, quien según ellos le había dado a RMS todos los cargos importantes que había desempeñado.

Lo cierto es que los hermanos Montemayor Seguy (Rogelio y Jesús María) tenían un gran parecido con los hermanos Salinas de Gortari (Carlos y Raúl), tanto en su manejo del poder, como en sus negocios privados: La corrupción y el tráfico de influencias eran la constante en su enriqueci-miento familiar. Incluso en el estado al “Chuma” se le conocía como “El Raúl Salinas de Coahuila”.

Mientras tanto, la inseguridad pública era el principal reclamo que los coahuilenses le hacían al gobierno montemayorista.
A mediados de noviembre, cuando el Procurador Humberto Medina Ainslie compareció ante el Congreso del Estado, sólo la voz del Foro de Abogados de Saltillo rompió el abyecto silencio de los diputados locales para manifestar su inconformidad, a través de pancartas y mantas que hacían referencia a la ineptitud, ilegalidad y prepotencia del Procurador montemayorista.

Los profesionales del Foro de Abogados de Saltillo, armados de valor insistían sobre los vicios del Procurador, quien se suponía que era “El abogado de la sociedad”.

No era la primera vez que los abogados del Foro protestaban, pero igual que en las otras ocasiones, los profesionistas fueron ignorados por los diputados, las autoridades y los medios.

Incluso, ocho meses antes, durante la visita de Zedillo a Coahuila, el Foro le había entregado una carta al Presidente en donde acusaban a Humberto Medina Ainslie de “incapacidad para procurar justicia, tráfico de influencias, impunidad, nepotismo, corrupción, violaciones constitucionales y ejercicio indebido de las funciones públicas”.

Mediante la misiva, los abogados le informaron al Presidente los nulos resultados de la onerosa “Cruzada de Seguridad Pública”, los negocios del despacho jurídico del Procurador, el Fiat notarial que consiguió su hijo sin llenar los requisito legales, el ocultamiento de información, y calificaron a la Procuraduría como la Cueva de Alí Baba. Pero nada pasó, Zedillo también hizo como que la virgen le hablaba.

El Foro había denunciado las mentirosas estadísticas del Procurador, y había cuestionado a la subprocuradora Juana María Flores Gómez, quien como Juez de lo Familiar la habían demandado en tres ocasiones hasta que abandonó su cargo, para convertirse en subprocuradora.

El Foro también había descubierto los trafiques del otro subprocurador, Gregorio Alberto Pérez Mata, quien como Juez de lo Civil se asoció con los abogados de Probursa para cumplir con la encomienda de dar una sentencia en contra del ayuntamiento de Saltillo que había presidido otro ladrón: Rosendo Villarreal. Por ese “trabajo” Pérez Mata consiguió la subprocuraduría. Estaba claro que con Montemayor ser corrupto, obediente, mafioso y lambiscón tenía sus recompensas.

Los abogados del Foro siempre han mantenido una actitud profesional, decorosa y digna ante el poder gubernamental, lo cual les ha traido marginación y bloqueo en su trabajo litigante.

Para conocer sobre la justicia en Coahuila, entrevisté a Guillermo Pruneda Barrera, Presiden- te del Foro de Abogados, quien señaló: “Medina Ainslie no ha funcionado como Procurador”. “De 44 agentes del Ministerio Público, sólo 18 cumplían con la ley”. “Violando la Constitución hicieron notario al hijo del Procurador”. “La procuración de justicia es nula en Coahuila”. “El subprocurador Gregorio Pérez Mata salió mal del poder judicial”. “El Procurador hace lo que quiere con el apoyo del gobernador”. “La Cruzada de Seguridad Pública es sólo publicidad, negocio para los medios”. “El abatimiento del rezago en la Procuraduría fue una farsa que nadie creyó”. “En Coahuila violan la ley los encargados de aplicarla”.

Estos señalamientos de 1995, podrían ser los mismos en 2012, pero ahora con el agravante de que no hay Procuraduría, ni jueces, ni agentes del Ministerio Público, ni policías confiables. Pero los políticos se siguen haciendose pendejos hablando de justicia, leyes y castigos. ¡Pobre Coahuila!

Debido a ello, Montemayor inventó “La Cruzada por la Seguridad”, supuestamente para responder a los reclamos ciudadanos. Todos los medios alababan “La Cruzada”, porque era publicidad pagada, así lo demostró Minerva de León, quien realizó un acucioso reportaje para El Periódico... que tituló: “La Cruzada por la seguridad o el negocio del año”. Las conclusiones de Minerva fueron dos: 1.- Sin contar la prensa escrita, se gastaron más de 25 millones de pesos en publicidad para la “Cruzada por la seguridad”. 2.- Este gasto representa el 50% del Impuesto Sobre Nóminas, o el 40% de lo destinado por Montemayor al desarrollo regional y productividad.

También el periodista Marcos Martínez Soriano contribuyó a desenmascarar a Humberto Medina Ainslie y a sus socios de la Procuraduría, y en su columna del 18 de diciembre de 1995, señala: “mentiroso, demagogo, hablador y hasta con oscuras ligas con la delincuencia resulta ser el inútil Procurador Humberto Medina. Protege a secuestradores y a ladrones ¿Por qué lo soportamos en el cargo?

Martínez Soriano -entre otras cosas- señala: “Un año se ha cumplido ya desde que el subprocurador de Procesos Jesús Torres Charles, el supervisor de la Policía Ministerial en la región sureste, y no menos de doce subalternos se les comprobó el haber estado involucrados en el robo de bienes que la Procuraduría debería estar resguardando en bodegas bajo su vigilancia. Pese ha haberse comprobado el robo, y pese a que los ladrones fueron separados de sus puestos, el ‘procurador’ jamás inició una investigación formal en su contra. Esto tiene mucho que decir, porque entre los ladrones estaba incluido su propio secretario particular”.

Con Montemayor Coahuila era tierra de todos, menos de los coahuilenses. Humberto Medina Ainslie trajo de Nuevo León a muchos de sus subalternos. Montemayor tenía en las nóminas del estado -con enormes sueldos- a fuereños recomendados, como María Isabel González Dweng, quien había sido secretaria de Raúl Salinas Lozano (padre del ex Presidente Salinas).

En ese entonces, gracias a Montemayor, a quien algunos moreiristas hoy califican de “Gran Gobernador” (también dicen lo mismo de Humberto Moreira. El que no conoce a Dios...), las tres ciudades más importantes de Coahuila ocupaban primeros lugares en desempleo: Monclova estaba en primer lugar, Saltillo en cuarto y Torreón en el treceavo sitio.

Por su parte, el Rector de la UAC, Alejandro Dávila, iba de mal en peor. Desde que perdió su pleito con las trabajadoras del Hospital Universitario, Alejandro se acostumbró a perderlas todas. Por ejemplo: Quiso poner a uno de sus compadres como Coordinador de la Unidad Torreón de la UAC y perdió ante Manuel Medina que era el elegido del gobierno estatal. 2.- En la Facultad de Jurisprudencia, salió a la luz pública una denuncia contra el director José Eduardo Perales González, quien junto con Mauricio González Puente (secretario particular del gobernador) habían creado un negocito en donde a cambio de unos cuantos miles de pesos, les conseguían lugar en la Facultad de Jurisprudencia a quienes no había pasado el examen de admisión.

El Consejo Directivo de Jurisprudencia destituyó al director, desoyendo al Rector que insistía en enviar el caso a la fantasmal Comisión de Honor y Justicia del Consejo Universitario, para darle carpetazo al asunto. Pero la comunidad de jurisprudencia, con un referendum, legitimó la destitución del director José Eduardo Perales González y convocó a elecciones para director.

Alejandro se había convertido en un problema para Montemayor, porque con su incapacidad ponía en riesgo el control gubernamen-tal que el gobierno tiene sobre la Universidad.

A principios de 1996, otro de los beneficiarios de la corrupción montemayorista, Claudio Bres Garza dejaba la Dirección de “Comunicación Social” y se iba a un puesto sin importancia: La Coordinación de Asuntos Municipales, pero no lo habían destituido de “comunicación social” para darle un coscorrón a los “Bárbaros del Norte”, grupo comandado por el Secretario de Gobierno Carlos Juaristi Septién, al que pertenecía Bres. Tampoco lo habían destituido por los negocios que hacía en “comuni- cación social”. Lo cambiaron de puesto para en- caminarlo a la Alcaldía de Piedras Negras, Juaristi “el gobernador tras el trono” se disponía a colocar a sus gentes en los principales municipios”.

Para suplir a Claudio Bres, Montemayor echó mano de la delegada de Pesca en Coahuila, Alba Celina Soto, otra fuereña importada por el gobernador. Alba Celina era sonorense, relacionada con el ex Presidente Carlos Salinas y el candidato asesinado, Luis Donaldo Colosio; debido a ello en su estado natal había sido diputada local, Presidente del Congreso estatal y dirigente del PRI.

Alba Celina, a quien los periodistas saltillenses le pusieron el mote de “Hablasolina”, presumía haber despachado en Palacio Nacional como encargada de atención ciudadana del gobierno salinista.

Lo cierto es que Alba Celina fue nombrada para fortalecer la imagen pública de Montemayor, la que se había deteriorado por la corrupción, incapacidad y soberbia del montemayorismo. Para cumplir su cometido, “Hablasolina” se encargó de delatar la corrupción que Claudio Bres tenía en “comunicación social” y rompió los tratos económicos que su antecesor había hecho con los dueños de los medios y con los periodistas.

Alba Celina quería realizar nuevos compromisos que no sólo pagaran los halagos al gobierno y el silencio de las críticas, sino que también aseguraran un apoyo incondicional de los medios al proyecto del gobernador. Para lograrlo, “Hablasolina” inició una campaña de autoexalta- ción para justificar su presencia en “comunicación social”. Según ella, había nacido para ocupar ese cargo, insistía en enfatizar sobre su gran honestidad, su enorme capacidad política y su lealtad a toda prueba hacia Montemayor. Pero bastaron sólo dos semanas para que Alba Celina creara en torno suyo un ambiente de chismes, pero a nadie sorprendió la actitud altanera, perdonavidas y sabihonda de Alba Celina.

Se supo que había pedido asesoría al mendocista Carlos Galván Tello, y que éste a su vez se había asesorado con otra “carabina de Ambrosio”, el fatuo ex director de “comunicación social” de Mendoza Berrueto, Gerardo Hernández González. Con esos asesores...

Alba Celina no cesaba en señalar que los convenios económicos entre el gobierno del estado y los editores y periodistas era corrupción, la cual ella terminaría “costara lo que costara”. “Hablasolina” quiso terminar con la corrupción, pagando para que los medios se hicieran pendejos ante el saqueo que estaba haciendo el montemayorismo en nuestro estado.

Pese a tantas pendejadas, Alba Celina no pudo evitar que la opinión pública se diera cuenta de la corrupción del gobierno montemayorista. Montemayor y su pandilla eran indefendibles, pues eran visibles las raterías y negocios, la inseguridad e incapacidad de los montemayoristas.

Alba Celina nunca entendió que para que se hable bien del gobernador y de sus funcionarios no basta con pagar las adulaciones y el silencio, también se requiere que los gobernantes y sus cómplices además de ser honestos y capaces, también deben parecerlo, tal y como le exigía el refrán popular a la esposa del Marqués.

Pese a que “Hablasolina” puso todo su esfuerzo y talento femenino para hacerle una decente imagen pública a su patrón, nunca pudo frenar los señalamientos que se le hacían a Montemayor incluso desde fuera del estado. Por ejemplo, desde la Secretaría de la Presidencia le ordenaron a Montemayor que la Comisión Estatal de Derechos Humanos señalara que la deportación de las mujeres indígenas y sus hijos -ordenada por Lucrecia Solano- constituía una violación a los derechos humanos de estas mexicanas. Así lo hicieron, pero culparon del abuso a los empleados que obedecieron la orden. La exhibición de esta arbitrariedad, consiguió que Lucrecia Solano bajara su perfil y su excesivo protagonismo.

Otro caso fue cuando mi amigo Miguel Eduardo Valle Espinoza,“El Buho”, fallecido el 3 de mayo de 2012, ex asesor de Jorge Carpizo en la PGR y autor del libro “El segundo disparo, la narcodemocracia mexicana”, señaló que el Presidente Carlos Salinas había impuesto a Sócrates Rizzo, Manuel Cavazos y Rogelio Montemayor en las gubernaturas de sus estados, para que protegieran al Cártel del Golfo.

Como siempre, la dirección de “comunicación social” impidió que la noticia circulara en Coahuila, pero provocó la curiosidad de los coahuilenses, y así se enteraron más ciudadanos.

Para contrarrestar las críticas a Montema-yor, Alba Celina inventó dos piadosas mentiras increíbles de creer que machaconamente difundió: 1.- Que Montemayor era un gobernador bueno, limpio, noble e ingenuo, a quien los Tartufos coahuilenses mantenían engañado. 2.- Que RMS era el gobernador más amigo y cercano al Presidente Zedillo. ¿Dónde he oído lo mismo?...

(Continuará).
La segunda etapa del sexenio montemayorista...

 
robledo_jgr@hotmail.com
 
 
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

     
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